Cada vez son más las ciudades que apuestan por modelos de movilidad sostenible, con el objetivo de reducir las emisiones contaminantes y preservar el medioambiente. Se trata de una tendencia imparable que está transformando nuestra forma de desplazarnos.
Qué es la movilidad sostenible
La movilidad sostenible se ha convertido en un elemento central de las políticas urbanas y de transporte en todo el mundo. Su objetivo es minimizar el impacto negativo de los desplazamientos en el entorno, promoviendo opciones de transporte que reduzcan las emisiones contaminantes.
Entre sus claves se encuentran potenciar el transporte público eficiente, impulsar vehículos de bajas o cero emisiones, fomentar la bicicleta y la peatonalización, desarrollar infraestructuras verdes y planificar las ciudades de forma inteligente.
Beneficios de implementar una movilidad sostenible
La implementación de políticas integrales de movilidad sostenible aporta beneficios en diferentes ámbitos:
Reduce la contaminación atmosférica y las emisiones de gases de efecto invernadero, además de mejorar la calidad del aire y la salud pública al disminuir el smog y otros contaminantes.
Descarga el tráfico y la congestión en las ciudades.
Fomenta hábitos de desplazamiento más saludables y activos, como caminar o ir en bicicleta.
Optimiza el uso de recursos y energía en el ámbito del transporte urbano.
Genera ahorros económicos sustanciales tanto para administraciones como para usuarios.
¿Qué son las ordenanzas de movilidad sostenible?
Las ordenanzas municipales de movilidad regulan el uso de la vía pública, promoviendo desplazamientos sostenibles. Algunas medidas son:
Limitar los vehículos contaminantes en determinadas zonas.
Ampliar líneas y horarios del transporte público.
Construir más carriles bici y ensanchar aceras.
Restringir el tráfico privado en zonas como el centro de ciudades.
Un caso de éxito es la ordenanza de Madrid, que ha impulsado el uso de transporte sostenible.
Smart cities, ejemplos de movilidad sostenible
Muchas ciudades inteligentes se han propuesto ser referentes globales en movilidad sostenible, con ambiciosas iniciativas como:
Sistemas de transporte público eléctrico alimentado con energías 100% renovables.
Restricciones de tráfico y creación de zonas de bajas emisiones.
Expansión de redes seguras de carriles bici y zonas peatonales.
Digitalización y optimización de los sistemas de transporte.
Puntos de recarga solar para vehículos eléctricos.
Regulaciones para reducir drásticamente sus emisiones contaminantes.
Papel de la energía solar fotovoltaica
Existe una importante conexión entre las políticas de movilidad sostenible y el impulso a la energía solar fotovoltaica. Su combinación refuerza la transición hacia un modelo bajo en carbono ya que:
La energía solar puede abastecer la demanda de los vehículos eléctricos y puntos de recarga.
Los estacionamientos con placas solares pueden suministrar energía directamente a los coches eléctricos.
Las estaciones de recarga se pueden equipar con paneles fotovoltaicos para una carga 100% renovable.
Reduce la dependencia de combustibles fósiles, principales causantes de emisiones contaminantes.
En Solar360 facilitamos la transición energética instalando sistemas solares fotovoltaicos para hogares y empresas. Contribuimos así a un modelo de movilidad urbana más sostenible y respetuoso con el planeta.
